Después de que la Contraloría encontrara cucarachas en el área de cocina del hospital Honorio Delgado, el director de la institución, Alexis Urday, justificó este hallazgo alegando que la jefa de cocina no estaba al tanto debido a su reciente asunción del cargo.
«Hubo cambios en la jefatura hace un mes, y se realiza desinfección diaria. La Contraloría nos ha dado cinco días para corregir esta deficiencia, que es la única que tenemos», declaró el médico.
Además, se identificó que la infraestructura de la cocina central era inadecuada, lo que podría dar lugar a la contaminación cruzada de los alimentos preparados, representando un riesgo tanto para la salud de los pacientes como para el personal que trabaja en el lugar.
Se observó el deterioro de la pintura en los techos, lo cual podría desprenderse y caer en los utensilios o en los alimentos. Asimismo, se evidenció que los pisos dañados generaban acumulación de agua, lo que podría propiciar la proliferación de microorganismos.
Después de la inspección, los auditores advirtieron que la infraestructura de almacenamiento en mal estado, junto con la falta de estanterías en la cocina y el mal funcionamiento de los hornos y cámaras de refrigeración, afectarían el adecuado almacenamiento, conservación y preparación de alimentos.