Un nuevo escándalo en la Policía Nacional en Arequipa. La Fiscalía dispuso la detención de dos efectivos del Departamento de Investigación de Robo de Vehículos (DEPROVE) acusados de permitir la fuga de un detenido que estaba bajo custodia por posesión de una motocicleta reportada como robada.
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Se trata de los suboficiales Jesús Begazo Lope y Wildher Gómez Mendoza, quienes anoche realizaban diligencias con el detenido Roberto Challco Ccolque (29). Según el parte policial, la última diligencia del día fue el registro domiciliario en la vivienda del intervenido, ubicada en la calle Benigno Ballón Farfán, sector Simón Bolívar del distrito de José Luis Bustamante y Rivero.
Al llegar al lugar, los policías relataron que la zona era oscura, estrecha, sin alumbrado público y rodeada de terrenos agrícolas. Mientras el suboficial Gómez descendía del vehículo para tocar la puerta de la casa, aseguró que perdió de vista la camioneta policial debido a un camión que obstruía la visión. Fue en ese momento que el detenido, a pesar de estar esposado, logró abrir la puerta trasera y escapar entre los matorrales.
El otro agente, en lugar de perseguirlo, optó por alertar a su compañero. Buscaron en la zona, pero no lograron encontrarlo. Según los propios policías, el detenido “ya tenía planeada su fuga” y, además, en la vivienda registrada nadie conocía al sujeto.
La Fiscalía, al no encontrar coherencia en la versión de los agentes, ordenó su detención inmediata mientras se esclarecen los hechos.
Este no es un caso aislado. En marzo del año pasado, también escapó el presunto sicario Paúl Presta Salazar, un ciudadano venezolano de 34 años. En aquella ocasión, el detenido pidió ir al baño desde la carceleta de la comisaría de Mariano Melgar y simplemente huyó. Hasta hoy, no se sabe nada de su paradero.
Ninguna autoridad policial se ha pronunciado oficialmente sobre estos casos, pese a la gravedad de los hechos y el impacto en la confianza ciudadana.