“Estoy arrepentido, tenía prisa”, expresó Cristhian Alejandro Molina Ponce (26) durante la audiencia de pedido de prisión preventiva en su contra. Él está siendo investigado por la Fiscalía por atropellar y causar la muerte de Glenda Ponce, profesora y madre de dos menores de edad, el pasado fin de semana en el distrito arequipeño de Socabaya.
La familia de la víctima llegó a la sede de la Unidad de Flagrancia Delictiva, en el cercado, minutos antes de la audiencia, con la esperanza de obtener resultados positivos. Sin embargo, tras más de seis horas de audiencia, la jueza de flagrancia de Arequipa, Hiancarla Dongo, dictó la decisión de imponer comparencia con restricciones por seis meses a Cristian Molina, lo que significa que continuará con el proceso en libertad. El imputado está siendo investigado por el delito de homicidio culposo. Además, se dispusieron diversas reglas de conducta que deberá cumplir durante el período de investigación.
La jueza también ordenó que la Inspectoría de la Policía Nacional del Perú (PNP) inicie una investigación a los efectivos que intervinieron en el caso, ante presuntas irregularidades en la toma de muestras de sangre. El dosaje etílico arrojó resultados negativos, y además, pasaron varias horas antes de realizar el examen toxicológico.
FAMILIA EXIGE JUSTICIA
El pasado sábado, Glenda Ponce salió de una tienda ubicada en el cruce de las avenidas Las Peñas y El Pasto, en el distrito de Socabaya, cuando un auto negro con placa A2C-259, conducido por Cristian Molina, circulaba a excesiva velocidad e invadió el carril contrario. Molina estuvo a punto de chocar con un taxi en el que viajaban una madre y su hija pequeña, para luego impactar contra la tienda donde Glenda Ponce se encontraba. Todo quedó registrado por las cámaras de seguridad. Tras el impacto, el conductor tomó su celular y caminó fuera del lugar, hasta que minutos después fue detenido.
Glenda fue trasladada de urgencia al Hospital Regional Honorio Delgado Espinoza, pero luego de varias horas de lucha, falleció, dejando huérfanos a sus hijos de 15 y 6 años. Fue enterrada en el Campo Santo Parque del Recuerdo, en Socabaya.
La familia de la víctima pidió justicia, además de la investigación de las presuntas irregularidades en el proceso de detención. También pidieron la intervención del área de Inspectoría para esclarecer los hechos.