Arequipa: Delincuentes balean a cambista y le roban 30 mil dólares en la puerta de su casa en Cerro Colorado

El cambista baleado denunció que un hombre con apariencia de policía lo siguió antes del asalto. Herido de dos disparos, pidió ayuda a los efectivos de la comisaría de Ciudad Municipal, pero le dijeron: “Primero ve a una clínica”.

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Sospecha que un policía lo seguía, pero la Policía lo ignoró.
Sospecha que un policía lo seguía, pero la Policía lo ignoró.

Un violento asalto ocurrió anoche en la zona 5 de Ciudad Municipal, en el distrito arequipeño distrito de Cerro Colorado. Un cambista de 71 años, identificado con las iniciales A.C.Q., fue interceptado por tres sujetos armados que le dispararon dos veces en la pierna derecha y le arrebataron 30 mil dólares en efectivo. Todo sucedió en la puerta de su vivienda, minutos después de que regresara de trabajar.

El cambista de 71 años, herido de bala en un asalto, permanece internado en el hospital Honorio Delgado. l Foto: Iletrados Noticias.
El cambista de 71 años, herido de bala en un asalto, permanece internado en el hospital Honorio Delgado. l Foto: Iletrados Noticias.

Los atacantes vestían de negro, llevaban mochilas y actuaron con absoluta frialdad. Una cámara de seguridad captó el momento del ataque: dispararon al menos tres veces y escaparon en un vehículo negro.

A pesar de estar herido, el adulto mayor logró llegar por sus propios medios hasta la comisaría de Ciudad Municipal. Lo que encontró allí fue aún más indignante: los efectivos no le prestaron auxilio. “Primero ve a una clínica”, le respondieron con frialdad. Sin apoyo, tuvo que ir por su cuenta al centro de salud de Zamácola, donde también le negaron atención. Recién en el hospital Honorio Delgado fue internado y puesto bajo observación médica.

Entre lágrimas, el cambista reveló a Iletrados Noticias sus sospechas: cree que fue seguido por uno de sus últimos clientes, un sujeto con apariencia de policía que le compró 100 dólares en la avenida Ejército. “Sentí que me seguía. Al llegar a mi casa, me golpearon por la espalda, puse resistencia, me dispararon… y me robaron todo”, relató.

Hoy, la víctima se recupera en una camilla. No solo con el dolor de las heridas, sino con la impotencia de saber que la respuesta del Estado, una vez más, fue el abandono.

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