Entre el olor a insienso y pétalos de rosas, se encuentra Irene Elena Mamani Flores de 77 años, quien, con su velo negro, cubre sus blancos cabellos y sus sandalias a duras penas cubre sus pies. Ella canta a viva voz «Hasta Cuando Hijo Querido» mientras carga un pesada cruz verde en su hombro derecho.
Ella lidera junto con los monagillos, la frentera de la procesión del Señor de los Milagros y con una mirada de esperanza cuenta su historia.
Irene, comenzó su devoción hacia el ‘Cristo Moreno’ desde que tenía 39 años de edad, en esa época, ella enfrentaba el reto de su vida, ser madre soltera de tres hijos a quienes no les alcanzaba el sustento que lograba conseguir. Allí, decidió encomendarse al señor y empezar a usar el hábito morado.
«El señor me ha concedido varios milagros, pero uno de los que siempre estaré agradecida será el de salvar a mi hijo, el se hecho a perder y yo lloraba, nadie lo hacía entrar en razón, hasta que encomende su espíritu y corazón al señor y me lo salvó. Cuando yo le pedía eso al Señor, cargaba esta cruz verde, y hasta este momento lo seguiré haciendo, representando su dolor y salvación» dijo entre lágrimas.
Irene contó también para ILetrados Noticias que desde que entró a la Hermandad del Señor de los Milagros, ha caminado descalza o con sandalias y nunca se pierde un recorrido por más horas que sea.
«En todos los 6 recorridos que se realiza en el mes de octubre, siempre lo he acompañado, no hay día en el que llego a sus pies, me arrodilló y me quito los zapatos para cargar la cruz y estar hasta altas horas de la noche».
La devota, instó a la población arequipeña a que se acerquen al Señor y perdonen a sus enemigos.
«Yo les invito a que sigan sus pasos, él perdona y nos ama mucho» dijo mientras seguía su rumbo en la procesión.