
El Ministerio Público solicitó la suspensión preventiva por 18 meses del comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), Víctor Zanabria Angulo, por los presuntos delitos de peculado doloso y abuso de autoridad. Los hechos se habrían cometido durante su gestión como jefe de la Macro Región Policial Arequipa, cuando habría ordenado que agentes policiales realicen trabajos de albañilería durante su horario laboral.
Según el expediente judicial N.° 02444-2024, al que accedió Iletrados Noticias, el pedido se sustenta en el artículo 297, inciso 1, del Código Procesal Penal, que permite la suspensión preventiva de derechos en casos de delitos sancionados con inhabilitación o cuando exista riesgo de reiteración delictiva.

La investigación fiscal también involucra al coronel en retiro Francis Alarcón Gallegos, quien en ese entonces era jefe de la Secretaría de la IX Macrepol y actualmente ocupa el cargo de prefecto regional de Arequipa. A él se le señala por supervisar y permitir que el personal policial fuera desviado de su labor principal —la seguridad ciudadana— para cumplir funciones de albañilería.

El requerimiento fiscal ha sido presentado ante la jueza Jannett Lastra Ramírez titular del Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria Especializado en Delitos de Corrupción de Funcionarios de Arequipa, solicitando que se programe la audiencia para evaluar la medida.
¿Por qué se investiga a Víctor Zanabria, actual comandante general de la PNP?
Según la carpeta fiscal, 15 suboficiales denunciaron a Víctor Zanabria, actual comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), por presuntamente obligarlos a realizar trabajos de albañilería en horario laboral, cuando él se desempeñaba como jefe de la Macro Región Policial Arequipa, en el año 2020.
De los 15 efectivos, seis han sido aceptados como testigos protegidos y ya rindieron su declaración ante la Fiscalía. En sus testimonios, aseguran que las órdenes vinieron directamente de Zanabria, quien les pidió que realicen trabajos ajenos a sus funciones policiales. Las tareas incluían labores de construcción, electricidad y gasfitería, actividades que, evidentemente, no forman parte del servicio policial.
Uno de los testimonios clave fue el de la mayor Claudia Del Castillo, quien relató que en una formación de rutina, Zanabria y el entonces coronel Francis Alarcón Gallegos —hoy Prefecto Regional de Arequipa— se acercaron a solicitar voluntarios del Escuadrón Verde que supieran de construcción. “En ese momento, 15 suboficiales levantaron la mano”, señaló.
Del Castillo agregó que, al pedir explicaciones sobre el pedido, el general Zanabria le respondió que se trataba de órdenes verbales y que debía acatarlas sin cuestionar. Incluso, según su testimonio, él le preguntó si “tenía miedo”, a lo que ella respondió: “Comprendido, mi general”.

Este caso pone en entredicho el uso de recursos humanos dentro de la Policía Nacional y plantea serias interrogantes sobre la integridad y el respeto a las funciones públicas en la institución encargada de garantizar el orden y la legalidad.