Hace dos años, Damián Boschetto salió a pasear con su perro, Muffin, una mezcla de border collie. En el bosque en Montouliers, a pocos kilómetros de su casa en Cruzy, en el sur de Francia, Boschetto buscaba fósiles, uno de sus pasatiempos favoritos después de estudiar paleontología en la universidad.
Pronto, encontró el hueso resultó ser el pélvico de un titanosaurio, una clasificación de dinosaurios de cuello largo que se cuentan entre las criaturas más grandes que han existido en este planeta. Había más de 30 variedades de titanosaurios, y los más grandes llegaban a pesar 70 toneladas y medir 26 metros de largo.
“Este es un descubrimiento raro y excepcional en Francia y Europa. El día que vimos que era un dinosaurio casi completamente conectado, la emoción estaba en su punto máximo”, señaló Boschetto.
Aunque el hallazgo se produjo en mayo de 2022, se anunció en 2024 después de que el fósil de dinosaurio casi completo, que se extiende desde el cráneo hasta la cola, fuera estudiado.
CARACTERÍSTICAS DEL FÓSIL ENCONTRADO
El esqueleto pertenecía a un titanosaurio, un grupo de dinosaurios saurópodos conocidos por su enorme tamaño, con este ejemplar en particular midiendo unos impresionantes 10 metros de longitud. Lo extraordinario del hallazgo radica no solo en la conservación de sus huesos, que estaban 70% completos y mayormente articulados, sino también en su rareza, especialmente en el contexto europeo donde los fósiles de titanosaurios son escasos.
Boschetto y el equipo de la Asociación Cultural Arqueológica y Paleontológica de Cruzy trabajaron meticulosamente para desenterrar este leviatán prehistórico, revelando piezas que datan del Cretácico Tardío, cerca del final de la era de los dinosaurios.
Los titanosaurios dominaron los paisajes del Cretácico con su imponente presencia, y este ejemplar encontrado ofrece una ventana única a la vida de estos gigantes, proporcionando datos valiosos sobre su anatomía, hábitos alimenticios y entorno ecológico.